viernes, 5 de septiembre de 2008

Hombres de Fe

La fe que mueve montaña, es la que mueve lo sobrenatural.
Ella mueve naciones, ciudades, pueblos, para que reconozcan al Señor Jesús como único y suficiente salvador de sus vidas. Así le creyeron a Dios, Abraham amigo de Dios y de mucha fe, Aod el zurdo, y Caleb el enérgico.
Abraham y Dios eran buenos amigos, Dios lo consideraba como “mi amigo” .Isaías 41: 8. Para ser amigo de Dios hay que ser escogido, El Señor es quien elige a sus amigos, nosotros aceptamos su amistad.
Es la fe y la obediencia la que nos hace amigo de Dios. El secreto de la amistad entre Abraham y Dios fue la fe. En Hebreos. 11:9 leemos: “Abraham por la fe, habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena…” La fe es el sexto sentido del ser humano; los cinco sentidos (vista, oído, gusto, olfato y tacto) nos conectan con este mundo natural, la fe (el sexto sentido) nos conecta con el mundo sobrenatural.

Durante dieciocho años hizo servir el rey Eglón a Israel, y Dios levanta a un hombre como Aod, lleno de fe. Jueces 3: 15. Aod escondió un puñal de medio metro entre sus vestimentas, con el cual mato al rey Eglón. Y dieron muerte a más de diez mil hombres, y hubo un largo periodo de paz en Israel por ochenta años. El ser zurdo era una desventaja física, pero no le impidió ser juez de Israel, y hombre de fe. Nuestros defectos o desventajas no nos deben incapacitarnos para realizar el servicio de Dios. No siempre los más calificados son los usados por Dios, sino los más disponibles, Dios prefiere usar un zurdo criticado, y no un calificado engreído, soberbio y rebelde. Jesús declaró con estas palabras; “porque muchos son los llamados, mas pocos escogidos” Mateos 20:16.

Caleb era un combatiente, un hombre de fe, enérgico, no se deja que nada ni nadie lo pueda distraer. Josué 14: 11. Fue entrenado para obedecer y eso es lo que hará el, era un hombre de fe y sacrificado, Caleb, si fuera necesario su vida la daría por su patria. La palabra de Dios dice:” Tu pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo…” 2Timoteo 2: 3-4. Un cristiano debe ser fiel, obediente, sacrificado, sumiso y lleno de fe. Un creyente que ama Dios debe sacrificar: todo su tiempo, planes, deseos, y otras cosas más. Caleb tenía ochenta y cinco años de edad, y caminaba en santidad, en oración, y en fe. Los años no le habían hecho mella, en su relación con Dios. Por tanto, Dios esta buscando los hombres de fe, tú puede ser uno de ellos. El señor esta preguntando: ¿dónde están los Abraham, los Aod, los Caleb, De estos tiempos? Porque sin fe es imposible agradar a Dios. Hebreos 11: 6

Apóstol David Lladó

1 comentario:

CASA APOSTOLICA AGUA VIVA dijo...

Que bueno es saber, que hay gente que se preocupa por la juventud de este pais. Dios bendiga su ministerio